El castillo de Rosenborg se encuentra en Copenhague, capital de Dinamarca. Esta ciudad es conocida como “La Riviera danesa” y tiene uno de los estilos de vida más satisfactorios del mundo, no solo por sus incontables lujos sino por su amplia sensación de confort y felicidad que se basa en gozar de la vida a través de planes simples, sencillos, baratos y agradables.
Sobre el Castillo de Rosenborg
Ubicado en los Jardines del Rey, en el centro de Copenhague, se alza el magnífico Castillo de Rosenborg, el cual resguarda entre sus muros tesoros de inconmensurable valor de hace más de 400 años. Se trata de un antiguo palacio que fue construido en el siglo XVII con un precioso aspecto de cuento de hadas, típico de muchos edificios daneses.
Sus orígenes datan del año 1606, cuando el rey danés Christian IV ordenó su construcción para usarlo como residencia durante el verano. No obstante, poco tiempo después, durante el gobierno de su nieto Federico IV, el castillo dejó de utilizarse para tal propósito.
Si bien su construcción tomó casi 30 años en finalizarse, Rosenborg se convirtió rápidamente en el castillo favorito del monarca. De hecho, antes de morir, el rey Christian IV pidió que lo trasladaran al fuerte para pasar sus últimos días de vida.
El Castillo funcionó como residencia real hasta el año 1710, cuando Federico decidió modernizar el inmueble. Acto seguido, el fortín comenzó a almacenar una colección de joyas reales y otros objetos de gran valor que incluso a día de hoy, permanecen visibles en sus estancias.
Entre las joyas reales se puede apreciar un sinnúmero de objetos que fueron parte de la nobleza y la aristocracia. Los más relevantes son por supuesto las Joyas de la Corona, la corona danesa y la alfombra de coronación. Los Regalia de la Corona Danesa son los símbolos oficiales de la monarquía, y se componen de un conjunto de tres coronas, un cetro que representan la autoridad suprema, un orbe, la espada del estado y una vara que significa la unificación de los monarcas.
También se resguardan diversas armas, armaduras, cristales, cetros, pendientes pinturas, porcelanas, piedras preciosas, vestimentas y otros objetos del día a día. En la década de los 1830, el castillo decidió abrir sus puertas como museo y en 1838, oficialmente se apertura al público con salas temáticas que permiten ir avanzando por la historia de Dinamarca.
El castillo-museo y sus residencias reales pasaron a manos del Estado, aunque en 1854, el monarca Federico VII hizo un acuerdo para que las colecciones siempre fueran propiedad real y pudieran heredarse de rey a rey.
Las alcobas de Rosenborg está perfectamente decoradas con el mobiliario original perteneciente al siglo XVIII. Estos elementos incluyen hermosos cuadros históricos y una lujosa ornamentación. Entre sus estancias destaca el salón del trono, el cual estaba custodiado por tres leones de plata, la sala de tapices reales y un trono que, como dato curioso, tiene un retrete incorporado.
Horarios, precios y ubicación del Castillo de Rosenborg
Puede llegar al Castillo de Rosenborg caminando desde la estación de Nørreport, la cual se sitúa junto al cuartel de la Guardia Real. Si toma la dirección norte desde la estación en el camino Øster Voldgade, llegará directamente a la entrada principal y taquilla de la fortificación.
El Castillo permanece abierto todos los días de 10:00 am a 5:00 pm durante el verano y de 11:00 am a 3:00 pm en el invierno. La entrada general tiene un precio de 120 DKK o 16,13 EUR. La entrada de los estudiantes tiene un valor de 75 KRR o 10,08 EUR, y los menores de 18 años tienen entrada gratis.
Se recomienda reservar su entrada con antelación. Si tiene la Copenhagen Card puede entrar de forma gratuita y reservar por la web. En este caso solo tendrá que mostrar el código QR de la entrada del recinto antes de acceder.