El castillo de Dunnottar se asienta en Stonehave, Escocia. Este es uno de los pueblos pesqueros más importantes de toda la cosa este del país. El centro del pueblo no es especialmente grande, pero transmite paz y tranquilidad. En él se levanta el Clock Tower, el reloj más valioso de la comunidad pues ha marcado la hora desde 1790. Otro punto de interés es The Burns Memorial garden, un jardín que recuerda al icónico poeta Robert Burn.
Sobre el Castillo de Dunnottar
En los empinados acantilados de Stonehaven se erige el Castillo de Dunnottar, una de las fortalezas más imponentes y emblemáticas de Escocia. Con sus enormes dimensiones, llamativa silueta y el relevante papel que ha jugado en la historia del país hace que todos sus visitantes se queden sin aliento al verlo de cerca.
Con solo poner un pie en el angosto sendero que lleva al majestuoso castillo escoces, verá por qué este monumento se emplaza en se lugar y por qué ha aparecido en películas de renombre como Hamlet, y Victor Frankenstein. De hecho, seguro le sorprenderá saber que este castillo sirvió de inspiración para crear el castillo de DunBroch, en la popular película de Disney, Brave.
El fuerte que se aprecia a día de hoy esconde una profunda historia entre sus muros. La realidad es que no se conoce mucho de sus orígenes, pero sí se sabe que ha estado funcionando como residencia desde la época de los pictos. Saint Ninian levantó en él una iglesia y también observó el fallecimiento del rey Donald II en una invasión vikinga. Otra de las cosas sobresalientes que ocurrieron en el castillo de Dunnottar fue cuando William Wallace incendió la capilla cuando unos soldados ingleses la estaban usando como guarida. De su vasta historia vale la pena resaltar la época en la que funcionó como hogar de los Condes Marischal, tiempo en el que le brindó asilo y protección a los Honores de Escocía.
De entre todos los elementos que verá en las ruinas del castillo, uno de sus edificios más memorables es la Tower House, con una particular forma de L. Aunque claro, no es la única que existe. Hoy por hoy es posible entrar en el fortín, en sus bodegas, establos, forja y capilla. Una de las habitaciones más espeluznantes es la mazmorra Whigs’ Vault. En ella 167 covenanters presos vivieron en cautiverio en condiciones paupérrimas durante nueve semanas. Si se considera valiente, puede adentrarse en su interior.
Este castillo resguarda múltiples leyendas de fantasmas y hechizos. A decir verdad, un castillo escoces que no tenga historias fantasmas es un castillo incompleto. Ahora bien, el supuesto fantasma que habita entre los muros del castillo de Dunnotar es la Green Lady o Dama Verde, y según cuentan, aparece en la destilería de cerveza del inmueble.
La historia de la Green Lady data de la época de los pictos. En aquellos tiempos se adoraba la feminidad, la masculinidad y los espíritus procedentes de la naturaleza. A causa de la fuerte simbología de naturaleza femenina en estas tierras, los pictos creían que este castillo era la residencia de la Dama Verde, un alma en pena que vaga por los pasillos del castillo de Dunnottar buscando a sus hijos perdidos. Años más tarde, en el siglo V, cuando Saint Ninian eligió este paraje para construir una iglesia, los pictos se convirtieron al cristianismo.
Este fortín es bastante conocido por haber salvaguardado a los Honores de Escocia: el cetro, la corona y la espada. Estos tesoros nacionales se utilizaron en la coronación de los reyes de Escocia durante la época de la independencia de la monarquía inglesa. Actualmente, puede verlos en el castillo de Edimburgo, aunque le pasaron por mucho antes de llegar allí.
En el año 1651, Carlos II, el sucesor de Carlos I, se coronó rey de Escocia en Scone. En ese momento, Cromwell y sus tropas acababan de llegar a Escocia, con la intención de poner fin al reinado del monarca y destruir cualquier símbolo de la realeza que se interpusiera en su camino. Era prácticamente imposible devolver los Honores de Escocia al castillo de Endimburgo en tan poco tiempo, así que se decidió ocultarlos en Dunnottar. Sin embargo, la sorpresa llegó cuando después de ocho meses de asedio incesante al castillo, Cromwell no encontró ni rastro de las joyas cuando este por fin sucumbió.
Los Honores habían sido sacados de la fortaleza con sumo cuidado entre sacos y valijas, y los habían enterrado en el cementerio de Kinneff. Así fue como la corona, el cetro y la espada sobrevivieron a ese terrible episodio.
Horarios, precios y ubicación del Castillo de Dunnottar
El magnífico castillo de Dunnottar se alza en un lugar estratégico en la cima de unos acantilados en Stonehaven, a tan solo 25 kilómetros de Aberdeen. Su posición no es casual. Todo se planeó perfectamente para que pudiera controlar las rutas marítimas y evitar los ataques por mar.
Además, estaba próximo a una ruta medieval terrestre que llevaba directamente a Aberdeen. Hoy en día, el acceso al castillo es sencillo, y puede llegar en coche, en transporte público y a pie. Antes de visitar el castillo de Dunnottar debe saber que no siempre está abierto al público. Es por esto que sus horarios de visita varían dependiendo de las fechas en las que decida visitarlo.
En verano (del 1 de abril al 30 de septiembre), abre todos los días de 9:00 am a 5:30 pm. Y en invierno (del 01 de octubre hasta el 31 de marzo), abre de 10:00 am a 4:30 pm. El fortín permanece cerrado los días 24 y 25 de diciembre, y el 1 y 2 de enero.
No olvide que las condiciones climatológicas de Escocia son brutales y, en ocasiones, el castillo de Dunnottar podría estar cerrado por causas meteorológicas, ya que su principal prioridad es mantener la seguridad de sus visitantes. Antes de adentrarse en sus monumentales habitaciones se recomienda visitar su página web para asegurarse de que esté disponible.
La entrada general tiene un valor de £7 (8,22 euros). Los niños deben pagar £3 (3,52 euros) y finalmente, las entradas para familias de 2 adultos y 2 niños entre 5 y 15 años, tienen un coste de £17 (19,97 euros).